La salud mental paterna se refiere al estado emocional y psicológico de los padres, que influye en su capacidad para enfrentar el estrés, manejar las emociones y mantener relaciones saludables, tanto consigo mismos como con sus hijos y familiares. Aunque la investigación específica sobre la salud mental paterna a menudo ha sido menos explorada en comparación con la materna, se reconoce cada vez más como un factor crucial para el desarrollo familiar y el bienestar infantil.
Una gran cantidad de investigaciones muestran que el 10 % de los nuevos papás experimentan depresión posparto paterna (el 50 % cuando la mamá está deprimida). Sin embargo, el estigma de experimentar dificultades en la paternidad temprana es aún mayor para los hombres que para las mujeres. La sociedad ve a los hombres como estoicos, abnegados y, sobre todo, fuertes. Cuando los hombres no sienten nada de eso como nuevos padres, no quieren admitirlo ni buscar ayuda.”
(PSI ALIANZA, 2024)
En el caso de México nos encontramos con grandes retos para prevenir y apoyar la salud mental paterna. Sin embargo, podemos hacer uso de lo que ya tenemos y apoyarnos de las herramientas ya existentes.
Es importante tener en cuenta que los hombres pueden ser menos propensos a reconocer o buscar ayuda para la depresión debido a estigmas culturales sobre la masculinidad, lo cual puede llevar a que los síntomas se pasen por alto o se malinterpreten. Es fundamental estar atento a cualquier cambio significativo en el comportamiento o el estado emocional de los hombres, y animarlos a buscar ayuda profesional si es necesario.